Evaluar el aprendizaje en una enseñanza centrada en competencias.

Trabajo número 9



Se habla de querer mejorar los sistemas educativos y la vía más fácil según la lectura, es proponer reformas nuevas, antes de evaluar las precedentes y antes de conocer lo que funciona bien y lo que no, se supone que las reformas se entienden como cambios algo nuevo que se pretende implementar para lograr objetivos, aquí interviene lo que es el curriculum como programa. En este punto no estoy muy de acuerdo, porque si se crean nuevas reformas se perdería la continuidad de las otras, sabemos que no todas las reformas o planes funcionan del todo, pero siempre hay algo que lo hace funcionar, para mí el punto principal de esto sería rescatar lo que funciona de las reformas anteriores y crear una nueva con estas, si se empieza de cero lo único que haría  sería bloquear a las personas que lo llevan a la práctica, y pues lo vemos ahora, muchos docentes, empezando por las instituciones no saben como empezar pero lo tienen  que hacer si no se atrasan.
Las competencias son la palabra clave para mejorar todo el sistema educativo; he visto en la lectura que estas competencias siempre se han manejado, siempre en una reforma se piden que se desarrollen, pero como lo hemos visto en otras exposiciones o en otros temas lo único que renuevan o innovan son la palabra pero en sí siempre se desarrollan al momento de aplicar los planes y estrategias las habilidades y destrezas, siempre se han manejado, el dilema ahora es que como se cree que es algo nuevo y se desconoce toda la información que nos han proporcionado ahora pues crea una inestabilidad en el sistema educativo.
En el desarrollo de competencias muchas veces se habla de que el alumno debe de razonar o ser capaz de criticar su propio aprendizaje, pero nos dice que en la evaluación se pide que se cuantifique, cosa que nos lleva a que ya no se esté valorando al alumno en sí, todo lo que el aprende lo seguimos haciendo calificación y se vuelve a dejar de lado lo que realmente aprende, es algo confuso por que ellos mismos se contradicen y al docente lo único que le queda es hacer lo que le piden.
 Nos dice que en la nueva visión de la educación se ha desaparecido del discurso las experiencias pedagógicas, expresiones asentadas en la tradición, esto es, aprendizaje significativo, por descubrimiento, trabajo en equipo, autonomía, el profesor reflexivo, en fin muchísimos más que son igual de importantes, y como todo esto se está perdiendo el conocimiento es solo un recurso que garantiza el crecimiento económico, para mi es que solo están creando personas que sean capaces de desarrollarse en el ámbito laboral de forma exitosa, y si no tienes todas estas competencias pues no eres nada, se busca crear mano de obra de alto nivel para las economías basadas en el conocimiento. En la actualidad todo se hace para beneficio de pocos y no de todos.
Negar las competencias y dejar de lado todo lo que implica la formación, todo lo que conlleve a un aprendizaje porque hasta en lo cotidiano y no solamente en instituciones educativas se desarrollan competencias, el ser madre, padre, mecánico, en fin todo tipo de profesiones, siempre lleva a desarrollar competencias en uno mismo y en los demás, por eso mencionada un poco antes que estas competencias siempre se dan, nunca se pierden.
Ahora el evaluar una competencia, que es lo que se pide solo se hace para que se vea que tanto aprendizaje se obtiene  y cómo es que el profesor avanzo en este sentido, entonces para las competencias se crearán para desarrollar en realidad habilidades o para ver cómo es que se está avanzando en la educación y si en verdad funciona, entonces no tiene ningún  objetivo que se evalúen y se pida que se obtenga un aprendizaje que el alumno sea capaz de criticar y razonar.
Una frase que se me hizo interesante y que se debe analizar es esta: “la transparencia de los procesos formativos puede alcanzarse mejor si desplazamos la atención desde el proceso de enseñanza hacia el proceso de aprendizaje, y consideramos el aprendizaje como eje central del proceso de formación, del diseño curricular y de la interacción didáctica", el conocer como todo es este proceso de formación nos llevaría a un resultado tal vez que se ha estado buscando, todo esto se puede ver en casos anteriores el proceso de enseñanza hacia al proceso de aprendizaje, conocer todo su proceso conlleva a conocer que es lo que realmente se busca y lo que se quiere lograr, el aprendizaje siempre se ve en todo ámbito por eso se dice que es el eje central de la formación, para diseñar un currículum y todo lo que este lleva, y como eje central de él se parte para la didáctica, buscar las formas de enseñanza.
La crítica a las competencias, nos dice que se habla muy bonito de las competencias, qué si se desarrollan va a funcionar de manera perfecta, pero el dilema es que si esto, realmente va a funcionar, como saber si los resultados que se obtendrán serán buenos, si se va a mejorar la enseñanza y el aprendizaje. Sabemos que en la actualidad se está manejando la nueva reforma que se basa en el desarrollo de competencias, pero el resultado no se sabe si se cumplió o se llevo a cabo el propósito.
Otro dilema es la evaluación de estas competencias, qué se podría usar para evaluar estas competencias, cómo evaluar el pensamiento crítico del alumno, se trata de dejar de lado lo tradicional, quitarnos del conductismo y llevar al constructivismo, esto es, un ser pensante, critico y autónomo de su contexto e ideas, esto realmente es algo difícil de responder, ahora cómo es que se ve el docente envuelto en esto, él no puede dejar salir su experiencias, su conocimiento,  ni su competencia profesional, por que debe seguir al pie de la letra lo que le dictan arriba, o sea los que mandan, los que le pagan, como se dice coloquialmente, no creo que sea justo exigir algo y no dejar ser uno mismo, como que mecanizan el aprendizaje, lo condicionan, pero para mí no debe ser así, si realmente queremos desarrollar esas competencias, deben poder dejar crear estrategias de evaluación  que no nos lleven al examen, dejar ser al maestro, sin que obstaculice lo que se pide.

Referencia:
Gimeno Sacristán, José. Comp. (2009). Educar por competencias ¿Qué hay de nuevo? Ediciones Morata.